Descubrí a Luis Eduardo Aute entre amigos, aquellos con los que jugué. Y en varios días, con un radio cassette de doble pletina, nos bebimos las 28 canciones del doble directo, ese doble LP que el maestro tituló ENTRE AMIGOS.
Descubrir a Aute fue también hacerlo con Serrat, con Pablo Milanés, con Silvio Rodríguez ... y éstos a su vez nos presentaron a otros muchos que nos hablaban de la libertad, del amor, de la muerte, de la vida. Todo eso con 17 años en una época que olía a democracia recién estrenada.
Pintor, escultor, poeta, cineasta, músico ... se nos ha ido un artista completo. Hoy sumamos a la tristeza de estos días la de perder a alguien que compuso la Banda Sonora de una generación, de mi generación, los que crecimos cantando Al Alba, Las cuatro y diez, Rosas en el Mar, De Paso, Albanta, Vaylima, Pasaba por aquí o Mira que eres Canalla ... y que nos quedamos con él gracias a Cine, Cine, Cine, Sin tu latido, El Universo, Lástima Luis, Ángelus, Cada vez que me amas, Va como va, La Belleza, Todo es mentira, Polvo enamorado, Siglo XXI ... prometo escribir sobre Aute y sus canciones. 25 discos de estudio, 4 directos, 8 recopilatorios y cuatro colectivos en 44 años dan para mucho.
Hoy sólo pretendo hacer un sentido homenaje al maestro. Y haciéndolo con él lo hacemos a todas las personas que en estos días nos han dejado. Un homenaje sincero aunque reprimido por la situación. Cuando todo esto pase, porque pasará y lo haremos juntos, entre todos y todas, deberemos mostrar públicamente el respeto que se merece toda esa generación de hombres y mujeres que nos dieron la vida y la libertad.
Maestro, va por Vd. Nos seguimos viendo. Gracias por todo, y por tanto.
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